sábado, 3 de marzo de 2012

Miren, no quiero ser pesimista.

-Miren, no quiero ser pesimista, pero el mundo tal y como lo conocemos, no es que se vaya a acabar, es que lo vamos a acabar. Sí, muchachos. Pero tranquilos, no el nuestro, ¡¡¡El suyo!!!.

-¡¡Bieen!!

-Tomaremos su planeta.

-¡¡Bieen!!

-Les haremos nuestros esclavos.

-¡¡Bieen!!

-Arrasaremos con sus campos.

-¡¡Bieen!!

-Quemaremos sus ciudades.

-¡¡Bieen!!

-Violaremos a sus mujeres.

-¡¡Bie...
+Pero señor, en ese planeta no existe el sexo femenino.

-¡¿Y qué existe entonces?!

+Solo un sexo, señor. No lo denominan de ninguna manera porque no hay más de uno. Se juntan por amor a quienes son, pero no quienes son físicamente.

-Entonces no violaremos a nadie, que eso es de maricas.

-¡¡Bieen!!

Que sí, que sí. Que el mundo seguirá igual incluso cuando hayamos avanzado tanto que encontremos nuevas civilizaciones en el universo y podamos llegar a ellas. Pero no quiero ser pesimista, eh.

No hay comentarios:

Publicar un comentario